jueves, 20 de junio de 2013

No sé si hacerle caso a la polla o al cerebro, o al corazón joder! amores perros.

Desde el banco observaba su manera de andar, siempre me había resultado curiosa, andaba como si escapara de algo, como con miedo.
Ella se me quedó mirando, se había dado cuenta de que estaba mirandole.
-Pero, no me digas que todavía lo sigues queriendo, después de tanto tiempo?
Permanecí unos segundos callada.
+No..-y lo miré nuevamente, como pidiendole perdón con los ojos- no, claro que no.
-No te creo, acabas de sonreír, sabes?
Algo se accionó en mí, no pude controlar las lagrimas
+No le quiero,.. es solo que.. no puedo más. Le extraño demasiado, no quiero decir que quiera volver con el, sino que eso, que le extraño, me cuesta mirarle y hacer como si  nada entre nosotros hubiera pasado, como hace el, me cuesta convertirme en una desconocida para alguién que lo fue todo para mi. Me cuesta, solo eso.
Su imagen fue desapareciendo hasta donde no alcanza la vista, una vez más (me) lo había perdido.
                                                Existen heridas que nisiquiera tú podrías curar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario